Nuestro Editorial nos lleva de nuevo a Ucrania. El gobierno ucraniano está totalmente decidido a evacuar la provincia de Jerson, la provincia tomada recientemente.
Al principio nos dijeron que había sido evacuada en un 75% por los rusos… Ahora nos dicen que el 75% que se fue lo hizo a Europa o a otra parte de Ucrania, por lo tanto, no son rusos sino ucranianos los evacuados. Si ustedes recuerdan, las informaciones que nos dieron cuando Jerson estaba bajo domino ruso, es que por orden de Rusia la población había sido evacuada y se la llevaban para zonas prorrusas, mientras tanto, iba siendo evacuado también el ejército.
Ahora es otra versión. El caso es que están ahí 75 000 habitantes y, sobe todos a los que tengan niños menores y personas mayores, se les recomienda (no pueden ser obligadas, pero no sabemos hasta qué punto es recomendación u obligación, ¿verdad?) que se vayan. Y, en ese sentido, se están habilitando diferentes cosas para facilitar, en alguna medida, una supervivencia digna porque esperan que haya bombardeos sobre Jerson. Y les recuerdan a los ciudadanos que los rusos están apenas a un kilómetro, tan solo cruzando el rio Dnieper.
Como ven, todo es muy confuso, pero… esto no se queda aquí. Resulta que el Parlamento Europeo, en reunión extraordinaria, ha declaro al gobierno ruso como un gobierno terrorista. Recogemos la noticia del diario El País:
“El Parlamento Europeo declara a Rusia como Estado promotor del terrorismo. La designación de la Eurocámara envía al Kremlin un mensaje sobre su aislamiento a medida que Moscú aumenta sus ataques contra infraestructuras civiles en Ucrania.”
Pues ahí tienen a los europeos… Aprovechando la coyuntura, declaran al gobierno ruso como promotor del terrorismo.
¡Vale!... Como hemos dicho muchas veces, y seguimos diciendo, y seguiremos diciendo, nadie apuesta por un alto el fuego, ni por un proceso de negociación, y menos aún Europa. Esto no ayuda a posibles movimientos diplomáticos, al revés.
Como decíamos ayer, las ayudas a Ucrania están siendo majestuosas en cuanto aprestamos, de unos calibres impresionantes, a los cuales luego se les dará todo tipo de facilidades para la devolución, claro. Todo esto no deja de ser un empeño en mantener una guerra, y luego van a cobrar los que la han mantenido todos sus beneficios.
En fin, es algo duro de asimilar y recoger, porque no se corresponde con el espíritu de nuestra especie: un espíritu solidario, un espíritu convivencial, un espíritu de cooperación, un espíritu de cuido. Nada de eso está. Pareciera que todo se ha derruido, destruido, ocultado, y solo aflora lo que vemos: ni una sola gota de bondad para paliar tanta desgracia. Todo pretenden arreglarlo con más armas y más dinero. En definitiva, más armas, porque el dinero se ha convertido en un gran arma.
Esta es la parte del puzle de hoy a propósito de la guerra de Ucrania. Impresentable humanamente. ¡Increíble! No solamente por parte de los protagonistas (que comienza con la invasión guerrera de Rusia), sino por parte de todos los países que tienen influencia y capacidad para parar esta sangría. Pero parece ser que no interesa, y se va para largo.
Esta confrontación ruso-norteamericana tiene todos los visos de ir para largo, y acabar con la dinastía -permitamos la palabra- del presidente ruso: Putin. Una revuelta interna en Rusia, ¿para cunado? Un cambio de paradigma en Rusia ¿para cuándo? Y, a continuación, retirada (si no del todo, casi del todo) y victoria programada para Ucrania.
¿Será ese el plan que se tiene? Y, claro, eso lleva su tiempo: lleva su tiempo organizar una revuelta bien organizada en Rusia para eximir a Putin de toda responsabilidad, y o bien, derruirle del todo y llevarle al Tribunal de la Haya. Es cuestión de estrategia, y es cuestión de tiempo… ¡Si es que ese es el plan! No lo sabemos. Pero los pasos que se están dado, como estamos viendo en el caso del Parlamento Europeo ahora, son en ese calibre y en esa dimensión. Aunque, se reúnen una y otra vez los rusos y norteamericanos para hablar de contaminación, y hablar de ataques y de otras cosas.
