Nuestro Editorial que vuelve a ser el jeroglífico de la invasión guerrera rusa en Ucrania.
El grupo Wagner se retira de Bajmut con el deber cumplido, según afirman, tras haber conquistado esa localidad, y en su lugar quedan las tropas rusas oficiales. Bajmut ha sido finalmente tomada por el grupo Wagner (formado por mercenarios).
Cada vez vamos descubriendo más mercenarios en Ucrania. Esto es típico de las guerras, pero hasta ahora lo tenían un poco oculto. Resulta que hay personas de la mafia japonesa, la Yakuza, combatiendo en Ucrania. Hay grupos con diferente “denominación de origen” pero, evidentemente, aceptados por el ejército ucraniano y/o ruso.
El caso es que Yevgeni Prigozhin, el hombre responsable del grupo Wagner, dice que han perdido 20.000 hombres…
Vamos a ver… Rusia dice, 6.000, y la oficialidad de Inglaterra dice 15.000. Fíjense ustedes qué diferencia tan… ¡enorme! Enorme, enorme. Por supuesto, por parte de las filas ucranianas no ha habido ninguna baja. Es una guerra muy rara. Solo hay muertos de un lado, y son los que han conquistado el sitio. Aquí “pasa algo”, pero… Nos limitamos a la información que sale, así, y nos deja, en nuestro jeroglífico, bastante confusos. Pero, bueno, no es la primera vez que ocurre esto.
Mientras tanto, por supuesto, no existe –ya lo ha dicho Zelenski- ni “hora cero”, ni “día H”, ni “día D” para la invasión o contraofensiva –que así se llama- ucraniana sobre Rusia.
Parece que se impone un poquito la “sensatez”. Nos explicamos: decían que venía la ofensiva en primavera, que venía la contraofensiva, que ya tenían tanques, y tal y tal… De decir todo lo que tenían, pasar a no decir nada… Lo que tengan, ya –más o menos- lo han dicho todo (aunque tendrán muchas más cosas que no sabemos). Pero, la contraofensiva no tiene ni hora, ni día, ni fecha. Quizás sea una estrategia de cara a los rusos, y resulte que sí tenga día, hora, y fecha. (Bueno, más que de cara a los rusos, de cara a la opinión pública mundial, porque los rusos tendrán otras informaciones con respecto a Ucrania, de acuerdo a los servicios de espionaje mutuos –ambos tienen- en los dos bandos del ejército). Esa información no la comparten con la población global como nosotros.
Entonces, ¿habrá contraofensiva? ¿O volvemos a la teoría, plausible, de que no habrá contraofensiva puesto que ya está pleno el ejército ucranio, entonces ahora es el momento de pactar y callar? No se sabe.
Lo anterior es lo que ocurre a “nivel guerrero”, pero, por otra parte, a nivel diplomático, Lula Da Silva ha dicho que, “evidentemente, no tiene nada que hacer”. Esto es así porque el tal y como plantea las cosas Zelenski.
Lula ha comentado un pequeño detalle: en la última reunión de los G7, se citó con Zelenski tres veces, y, en las tres, el ucraniano le cambió el horario, y en la última, Zelenski le dio plantón a Lula. Entonces, como que “no le ha sentado bien”. En cambio, Zelenski ha dicho que no se había encontrado con Lula “por motivos de agenda” …
No creemos a Zelenski; creemos a Lula. Eso de “agenda” es muy genérico. Hubo tres citas, y en la tercera esperaron, y no llegó. Sin ninguna justificación. Y se cerró. Entonces, Lula considera que su plan no tiene eco allí. En consecuencia, esa vía diplomática empieza a ser mortecina.
En cuanto a otras vías, la rusa sigue manifestando que las relaciones de Rusia con China, y de China con Rusia, son cada vez mejores (en lo económico, en lo conceptual…). Cada día mejores. Todo el mundo está expectante por si China colabora con Rusia, o no.
Mientras tanto, entre lo diplomático y lo belicoso, Rusia ha obtenido permiso de Bielorrusia para asentar armamento nuclear en territorio bielorruso. Obviamente, apuntando, a donde quieren apuntar –como estamos hablando de la guerra, pues apuntando a Ucrania-. Bielorrusia tiene frontera común con Ucrania, entonces, el gobierno bielorruso ha dado el visto bueno para implantar armas nucleares en su territorio.
No sabemos cómo le vamos a llamar a esto: “la contraofensiva de la contraofensiva”. Porque, claro, en plantar material bélico de carácter tan serio como el nuclear, no se tarda mucho. No crean. ¡Esto se hace muy rápido! Para eso están los transportes (aviones, etc.). Es cuestión de que Bielorrusia dé permiso y, a partir de ahí no se tarda mucho.
Creemos que ésta ha sido una jugada por parte del Kremlin –de Putin- muy tranquila y relajada. Ya había amenazado con armamento nuclear –en general-, pero ahora ya lo ha concretado en Bielorrusia. Va a instalar armamento nuclear para la defensa de sus territorios. Así lo piensan ellos.
Zelenski ha estado ayer y hoy un poco callado. No ha tenido ninguna declaración significativa. Aunque, sigue diciendo que hay unas pequeñas tropas en Bajmut. No acaban de asimilar que Bajmut ya es territorio conquistado ruso. Y parece ser que todos, menos Ucrania, admiten que eso es así.
Por si acaso –y ésta es una notita a la que hacíamos alusión en un tuit publicado en nuestra cuenta de Twitter-, ya están hablando de reconstrucción nacional en Ucrania. Se ha reunido el presidente Zelenski con miembros de la comunidad europea, para hablar de la “Gran Europa” que surgirá después de la guerra con la reconstrucción –reconstrucción- nacional. Se ha calculado que se necesitarán 34.000 millones de euros.
Pero… vamos a ver: si aún no se ha acabado la guerra, ¿cómo es que se calcula que la reconstrucción nacional va a costar 34.000 millones de euros? ¡A ver si es que se va a acabar ya la guerra y por ello necesitan 34.000 millones de euros –procedentes de Europa, claro- para la reconstrucción nacional!
Ha habido un “speach” de Zelenski en todo imperativo-dominante, diciendo que la “Gran Europa se va a ver, y se va a dignificar, con la “Gran Ucrania”, o sea, con la presencia de Ucrania en Europa, y en la OTAN, etc. Pero, ¡ya cifran una cantidad! 34.000 millones de euros.
Ciertamente, nos parecen cifras “astronómicas, las cuales no nos parecen –tampoco- desproporcionadas, tal y como nos han mostrado imágenes de la guerra y de la destrucción que ha traído consigo.
Reconstruir un país en guerra, por lo menos en las zonas guerreras, no es barato. Pero, nos ha llamado la atención que se haga esa reunión, ¡sin haber terminado la guerra! (porque continúa). Sin haber hecho negociaciones, hablando de la contraofensiva, ahora también se habla de la reconstrucción nacional, la cual costará 34.000 millones de euros.
O sea, parece ser que, a la vez que hay ecos de contraofensiva, hay otros ecos de “quieto; vamos a ver qué podemos hacer a partir de ahora con un alto al fuego” En fin, éstas son nuestras cábalas.
JC Afán: Como decíamos, cuando esto termine, la OTAN ha llevado a... Pero, con lo que se está diciendo de que ahora su gran aliado, Bielorrusia –que yo creo que, para Putin, Bielorrusia es Rusia- armar esa frontera es tener claro que hay que prepararlo todo para tener defensas en la parte que toca con Polonia, con Ucrania y con Bielorrusia. Perfectamente equipada. Y, en este caso, el mejor sistema es el de disuasión nuclear. Porque, no te vas a meter ahora –como se ha hecho en el otro lado- a hacer las trincheras, etc. No, no, no. Ahí lo que tienes que demostrar es lo que va a demostrar la OTAN cuando llegue a Finlandia y Suecia. Exactamente lo mismo en este lado. Es decir, como que hay muchas carpetas funcionando al mismo tiempo, pero todas van buscando tenerlo todo preparado para el Día D, la Hora H.
Pues vamos a ver. Esperemos que sea así. Vamos a ver. Ojalá, ojalá.